miércoles, 9 de enero de 2013

La bondad interior.

Hace unos años le mandé un mensaje a una amiga. Mi desasosiego interior era tal, que le puse " ....tengo la necesidad imperiosa de despedirme de alguien y no sé quien es". Tres horas después un familiar fallecía. Fue entonces cuando decidí quitarme la venda de mi yo interior e inicié mi investigación sobre aquello que no se podía ver con nuestros ojos humanos o razonar con nuestra mente científica. Me puse la venda a los 12 años a pesar de todo lo que "veía"....

Decimoquinto mensaje ( I ): La bondad interior.

"Para aquellos de vosotros que pensáis que no sois merecedores de la luz, para aquellos de vosotros que os juzgáis y os condenáis por no poder mantener vuestra impecabilidad ( sin pecado), yo os digo:
Cuando un humano se retira a un centro, a una montaña, a una casa o a cualquier otro lugar en el que está más o menos en soledad y alejado del día a día, es fácil mantener un estado de bondad, amor y perdón.
Pero, la mayoría de vosotros tenéis que trabajar, tenéis familia, tenéis que convivir en un edificio con vecinos, o en una misma casa con varias personas.
Entonces surgen los roces, los conflictos con el padre, madre, hijos, jefe, vecina, conductor, marido, esposa....y así sucesivamente, y vosotros os sentís culpables por no poder manteneros alejados de la crítica que hacéis a los demás, os sentís culpables de no estar todo el tiempo bajo el influjo de la bondad que sabéis habita en vuestro corazón y entonces os sentís culpables.
Yo os digo, sois humanos, es normal que sintáis que no siempre sois perfectos en bondad y comprensión, precisamente por eso estáis ahí, para aprender.
Debéis aprender a sacar la bondad de vuestro corazón a pesar de las circunstancias que os rodeen. Lo que no quiere decir que no haya momentos en los que no controléis totalmente vuestro enfado.

Siempre y cuando respetéis a vuestro hermano, a pesar del enfado, estaréis en el buen camino.
Siempre y cuando seáis capaces de detectar en vosotros el enfado y analicéis que no merece la pena hacer sufrir, ni sufrir por esa nimiedad, estaréis en el buen camino.
Siempre y cuando seáis capaces de pedir perdón desde lo más profundo de vuestro corazón, con la certeza de que no volveréis a cometer ese acto alejado de la bondad, estaréis en el buen camino.

Sabed que la verdadera prueba de vuestra evolución está en la forma de convivir que tenéis con vuestros hermanos.

Con gran devoción.
Miguel, hermano de luz de mis hermanos humanos. Estoy en vuestro interior. Sentidme.
01/01/13
www.viajerosdeluz.blogspot.com.es

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